Entre irregularidades benefició Semarnat a empresa para construcción de residencial en la riviera veracruzana

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Víctor M. Toriz/ TVN Veracruz

En medio de diversas inconsistencias, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) favoreció a la empresa Sirona Desarrollos S.A. de C.V. con la autorización de dos manifiestos de impacto ambiental que permitirían realizar la construcción del complejo residencial Mandara en uno de los últimos reductos de selva baja ubicado en la parte norte del municipio de Alvarado.

El proyecto se mantiene detenido únicamente por el litigio que vecinos del fraccionamiento Lomas Residencial promovió en contra de la obra, aunque este se trata de una controversia generada por la inconformidad en el uso del derecho de vía que se encuadra dentro como un conflicto de intereses, más no por un tema ambiental.

El primer Manifiesto de Impacto Ambiental de citada empresa fue promovido el 26 de julio del 2016 y autorizado el 16 de noviembre de ese mismo año, según consta en la Gaceta Ambiental de la dependencia federal.

Sin embargo, el documento presentado por la empresa en la que figura como único representante legal Sergio Eduardo Morales Gómez, omite la presencia de una laguna de al menos 27 hectáreas que se localiza en medio del predio.

En el documento aprobado por la Semarnat se detallan las características del ecosistema de la siguiente manera:

“El área del predio se trata de un sitio que prácticamente se encuentra rodeado de desarrollos habitacionales consolidados o en vía de ello.

“Se trata de un predio cubierto en gran parte de su superficie por pastos propios de ecosistemas costeros y relictos de selva baja, características de la zona centro del estado.

“La colindancia con el estero (río horcones), lo hacen un sitio atractivo.

Por la forma y topografía del sitio, se trata de un predio con una vista amplia, dominada prácticamente desde cualquier punto.”

En ninguno de los puntos se menciona el cuerpo de agua el visible a varios metros de distancia, que, por las dimensiones y la topografía del suelo en los alrededores, hubiera sido imposible que personal de la dependencia federal no se percataran de su localización al realizar una inspección en el sitio.

Pero no solo eso, en el mismo Manifiesto de Impacto Ambiental palomeado por la Semarnat en favor de Sirona Desarrollos S.A. de C.V. la empresa incluyó dentro de sus acciones de remediación la construcción de un lago artificial, al incluir un área privada de conservación.

Después del análisis a citado documento, el Comité de Vigilancia Ambiental certificado por la Profepa ‘Earth Mission Veracruz’, advierte que la empresa estaría ocultando la presencia de la laguna para reducir su tamaño con la intensión de ampliar la superficie que serviría para lotificación y rellenar los márgenes hasta convertir el manantial de agua en un lago artificial.

Excluyó la presencia de fauna

Lo anterior generaría una grave afectación al ecosistema que sirve como hábitat de diversas especies de flora y fauna silvestre documentados por la agrupación ambientalista en un muestreo que realizan desde enero del 2018.

En el estudio que realiza Earth Mission se tiene registro de 84 especies de fauna que habitan en el área, de las cuales al menos 12 se encuentran protegidas y normadas por la Norma Oficial Mexicana 059 (NOM-059), que regula la conservación de especies amenazadas o en riesgo de extinción.

La evidencia recogida a través de fototrampas, trabajo de observación y captura de huellas contradice lo informado por Sirona Desarrollos S.A. de C.V., que falseó la información en el MIA al reportar la presencia únicamente de 27 especies animales y afirmar que ninguno de ellos se encontraba dentro de la protección de la NOM-059.

Enrique Samberino Villareal, representante legal de Earth Mission, presentó una denuncia ante la Profepa en contra de la Sirona Desarrollos S.A. de C.V. por falsear información en el documento que presentó para conseguir la autorización del proyecto, pero al mismo tiempo se alistaría la denuncia penal en contra de los funcionarios que fueron responsable de la aprobación del proyecto en la Semarnat, para aclarar si se incurrió en omisión o complicidad en favor de la empresa.

Daño ambiental

El segundo Manifiesto de Impacto Ambiental que la Semarnat autorizó a la empresa que pretende construir Mandara se solicitó el 23 de febrero del 2017 y quedó aprobado el 19 de julio de ese mismo año.

En el resumen publicado en la Gaceta Ambiental de la dependencia federal correspondiente al número DGIRA/010/17 se detalla lo siguiente:

“El proyecto se refiere a la habilitacion (sic) de un camino de terracería (sic) para vialidad de acceso a fraccionamiento y predios contiguos en ecosistema costero, a desarrollarse sobre una superficie total de 7,348.984 m2, ubicado adyacente al lindero sur del club de golf “villa rica” en el municipio de Alvarado, Veracruz, dicho proyecto constara de una sección vial de 22.00metros (2.50 metros de banquetas en ambos lados, 7.00 metros de arroyos en ambos sentidos y camellon central de 3.00), para brindarle funcionalidad y servicios adecuados a los usuarios”.

En un recorrido que se realizó por el paso de servidumbre de uno de los fraccionamientos contiguos se pudo constatar y documentar con fotografías que los trabajos para la construcción de la vialidad referida comenzaron.

Para ello se utilizó arena de mar para rellenar zonas en donde hasta octubre pasado se mantenía una abundante flora silvestre propia del ecosistema de selva baja costera, lo que generó problemas de erosión graves, afirmó Sergio Armando González, quien encabeza las investigaciones que Earth Mission realiza desde hace un año en el sitio.

Pero el relleno y la apertura de la vía para el acceso de vehículos que por ahora sirven para emparejar el terreno no son las únicas obras que se realizaron hasta ahora en la zona.

Con evidencia fotográfica también se puede comprobar que maquinaria pesada abrió una zanja que pretendió conectar el cauce de la laguna con la selva de mangle localizada a unos 200 metros, con la finalidad de drenar el agua y reducir su tamaño, como sospecha la agrupación ambientalista que se planea desde el inicio.

Otro punto en el margen de la laguna situado a un costado del paso de servidumbre muestra la presencia de maquinaria pesada que extrajo parte de tierra y vegetación en el sitio, como si se tratara del inicio de trabajos de dragado.

Incumplimiento de medidas de mitigación

En el Manifiesto de Impacto Aambiental se detallan las actividades para llevar a cabo el cambio de uso de suelo.

Si bien Sirona Desarrollos S.A. de C.V. cuenta con la autorización de Semarnat, los trabajos que realizó hasta ahora dentro del predio incumplen las medidas de mitigación a las que se compromete en el primer Manifiesto de Impacto Ambiental con clave 30VE2016UD065.

El documento detalla las actividades que el constructor tiene que ejercer para poder realizar el cambio de uso de suelo forestal a urbano, en donde se incluye el rescate y reubicación de flora y fauna silvestre como primera medida, algo que no ha realizado.

“Para efectuar el cambio de uso de suelo se consideran cuatro etapas, actividades previas tal como el rescate de flora y fauna silvestre, continuando con la segunda etapa la preparación del sitio contempla el trazo del predio, desmonte, marqueo, derribo, así como el acomodo y manejo de los residuos de la vegetación removida y para concluir con esa etapa se nivela y se rellene, una vez concluidas las actividades anteriores se prosigue con la etapa de construcción la cual contempla el establecimiento de la red eléctrica e hidráulica, drenaje, construcción de banquetas, establecimiento de guarniciones, también se establece una planta tratadora de aguas residuales y finalmente el mantenimiento y operación en la cual solo se efectuará la venta de lotes Con el fin de no dañar la fauna y respetar la flora del área de CUSTF el rescate y la reubicación se realizará antes de que comience cualquier actividad”, dice a la letra el documento aprobado por Semarnat.

Por lo tanto, las obras estarían transgrediendo las especificaciones que la autoridad federal aprobó con las diversas irregularidades referidas, afirmó el vocero de Earth Missión.

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El Edén oculto

El azul profundo que contrasta con el verde de la vegetación espesa da la impresión de una acuarela, pero es el canto del halcón corredor volando bajo sobre el espejo de agua, a la caza, interrumpe la primera impresión de una imagen estática.

Solo después de superado el primer golpe de tanta naturaleza es que comienzan a notarse la presencia de aves colgadas de los árboles sin hojas, que se levantan en medio de los pastos con hojas afiladas distintivas en selvas bajas y humedales, entre lirios y flores silvestres.

Otras aves nadan o sobrevuelan a diversas latitudes, algunas endémicas y otras migratorias que utilizan el sitio como descanso.

El aire del norte atraviesa por encima de la laguna y llega fresco hasta el otro lado, en un proceso de enfriamiento natural que propicia el ecosistema costero.

El agua en la laguna es transparente, no recibe ningún tipo de desecho a pesar de que a unos dos kilómetros de distancia se levantan los fraccionamientos de la más alta plusvalía del estado de Veracruz.

En un camino de arena de mar, que fue transportada hasta ese sitio para construir indebidamente un paso para los vehículos que transportaran el material para las viviendas que se planean construir, se pueden ver huellas marcadas de diversos animales.

Unas marcas profundas que podrían confundir con la de un perro, se trata del paso del coyote a un costado del camino, especie que es avistada durante las noches y eventualmente en el día.

Otras huellas parecen de manos en direcciones contrarias, son de tlacuaches; mientras que las que se dibujan con tres dedos pertenecen a osos hormigueros, aunque las más notorias son las que se vuelven un zigzag continuo, de boas y serpientes de cascabel.

Son solo algunas de las especies de fauna silvestre que se habitan en el sitio, otras más permanecen ocultas debajo de la tierra, como el cangrejo azul, o en el agua, como el cocodrilo moreletti y al menos seis especies de tortugas de agua dulce consideradas como prioritarias en las leyes federales.

Se trata, probablemente, del último reducto de vida silvestre en la zona conocida como La Riviera Veracruzana, que tuvo su apogeo inmobiliario entre los años 2003 y 2012, pero que ahora es amenazado por la intención de revivir ese boom de bienes raíces, a través del proyecto Mandara, el cual pretende construir unas mil 500 residencias en el sitio, con el falseo de información y la omisión u opacidad de la Semarnat.

Antecedentes:

Clausura PMA obras a Mandara
El viernes 22 de febrero la Procuraduría de Medio Ambiente del Estado (PMA) detuvo los trabajos que la empresa Sirona S.A. de C.V. reaunudó para la construcción del fraccionamiento Mandara, luego de casi un año de mantenerse detenidos por el litigio que mantiene con vecinos del fraccionamiento Lomas Residencial, que se oponen al proyecto por el uso que hará del derecho de vía, más no por un asunto de bienestar y conservación ecológico.

La dependencia estatal solicitó las licencias de construcción estatales en materia ambiental para permitir la continuidad de los trabajos, pero al no poder ser mostradas se levantó un acta circunstancial.
Al día siguiente un nuevo intento para reanudar los trabajos fue interrumpido con la colocación de sellos de clausura en el acceso que se hizo a la obra al destruir la barda perimetral de Lomas Residencial, además de la inmobilización de la maquinaria pesada.

Salvo el procedimiento temporal por parte de la autoridad estatal, no existe ninguna otra acción por parte de autoridades ambientales de ningún orden de gobierno para suspender la obra en definitiva, que acabaría con un ecosistema donde habitan al menos 12 especies protegidas por las leyes ambientales y que sería el último pulmón natural de la zona.

La agrupación Earth Mission es la única que abiertamente presentó una denuncia ante la Profepa, para buscar detener la depredación que se alista en el lugar.