Autoridades estatales deben impulsar estudios de microzonificación sísmica, ante identificación de zonas de riesgo: Especialistas

Xalapa, Veracruz a 03 de Abril de 2018.- Xalapa, Veracruz y Orizaba se encuentran entre las zonas de mayor amenaza sísmica probabilística ante futuros eventos, así está documentado en la investigación dirigida por el académico del Centro de Ciencias de la Tierra de la Universidad Veracruzana (UV), Gilbert Francisco Torres Morales.

En dicho estudio titulado ‘Amenaza sísmica probabilística considerando efecto de sitio en zonas conurbadas del estado de Veracruz”, se vislumbran aceleraciones máximas y de riesgo a nivel estructural ante fenómenos de tal naturaleza.

Al respecto, el investigador, señaló, que en Veracruz existen antecedentes históricos de eventos sísmicos ocurridos en el siglo pasado.

“Gracias a estudios previos de microzonificación sísmica efectuados en zonas de Xalapa, Veracruz y Orizaba, ya se contaba con un recuento de datos del área urbana, hidrografía, geotecnia, así como diferentes tipos de suelo”.

Y abundó, “la microzonificación sísmica integra información disponible de los suelos y la vibración ambiental, con esto podemos identificar zonas donde los suelos amplifican las ondas sísmicas”.

En tanto, comentó, que los resultados preliminares de la investigación, muestran que en el estado de Veracruz se obtendrían aceleraciones máximas del terreno para periodos de retornos establecidos y estructurales ante un evento sísmico.

“El conocimiento de las condiciones regionales de ocurrencia de eventos peligrosos, así como las características reportadas sobre eventos históricos, proveen una primera idea del potencial de los fenómenos que amenazan la región”.

La entidad veracruzana ha sufrido daños importantes debido a sismos de gran intensidad, tras el terremoto de 1985 en la ciudad de México, con más de 6 mil víctimas, “en Xalapa sucedido uno en 1920, ocupó el segundo lugar del país con 650 personas fallecidas y, el de Orizaba de 1973 es el tercero, con 539 muertos”.

En ese sentido, el experto en ingeniería sísmica, explicó, que para Xalapa el periodo de retorno (tiempo en que volvería a repetirse un evento sísmico similar) es de 100 a 150 años y para Orizaba entre 75 y 100 años, aproximadamente.

“En este último municipio, por ejemplo, el sismo fue de profundidad intermedia de subducción intraplaca, que para la región central del estado de Veracruz son de los más dañinos”.

Asimismo, Torres Morales., indicó, que los fenómenos extremos hidrometeorológicos desencadenan deslizamiento de laderas; de allí que el número de víctimas del sismo de 1920 fue a consecuencia de este factor.

Por lo anterior, consideró, que el gobierno del Estado, debe impulsar estudios de microzonificación sísmica en áreas urbanas con estudios de vulnerabilidad sísmica estructural, a fin de identificar zonas de colapso ante un evento sísmico; así como invertir  en equipo sofisticado de monitoreo para instalarse en zonas urbanas.

“Es necesario identificar edificaciones antiguas y altas que son las más peligrosas; de ahí la necesidad de reglamentar para contribuir a que se construyan estructuras más seguras. Las ciudades como Xalapa, Orizaba y Veracruz, tienen edificaciones históricas y requieren de estudios de vulnerabilidad”.