Debido a la desaparición de las juntas de conciliación y arbitraje se debe de lograr una mediación entre patrón y trabajador

Xalapa, ver. 2 de marzo, 2021.- Leticia Hernández Villeras, coordinadora del Instituto de Mediación Veracruzana, dieron a conocer que debido a que la reforma laboral que define la desaparición de las juntas de conciliación y arbitraje, se hace importante que se logre la mediación entre las partes como el patrón y el trabajador para evitar la judicialización de los casos ante los tribunales.


En conferencia de prensa realizada en conocido cafe del centro de Xalapa, integrantes del organismo certificado y privado de mediación, anunciaron la celebración del primer diplomado en métodos alternos de solución de conflictos, dicho instituto acreditado por el Centro Estatal de Mediación de Medios Alternativos del Poder Judicial; indicó que dicho diplomado se llevará a cabo de manera virtual, a partir del 19 de marzo y hasta el 3 de julio de este año.


«Es muy importante que las partes puedan solucionar, a través de la ayuda de un mediador, fortaleciendo el diálogo para tener una solución a su conflicto y no se queden con esa sensación de que uno pierde y uno gana. La mediación es ganar-ganar», señaló.


Dio a conocer que la reforma laboral establece que antes de ir a juicio las partes deben optar por la conciliación, pero debido al confinamiento por la pandemia han incrementado el número de solicitudes de mediación, pero sobre todo en materia familiar, por lo que recalcó que antes del litigio es importante llegar a un acuerdo.


Por su parte, Angélica Idalia Torres Martínez, mediadora certificada del CEJAV, aseveró que lo que se trata de establecer es una cultura de paz a través de la mediación de los conflictos, «Estamos inmersos en una cultura, en donde nuestro día a día es a través de la contienda, aquí lo que estamos construyendo es que como ciudadanos tengan herramientas y haya profesionistas que puedan orientar a las personas que se encuentren en conflicto».


Finalmente como ejemplo señaló que en un despido injustificado es necesario agotar la etapa de la conciliación, es decir, llegar a un acuerdo y no se amerite judicializar el asunto.