Contaminación y presencia humana alejan a nutrias del río Actopan

Claudia Peralta Vázquez 

Xalapa, Veracruz a 18 de julio de 2020.- La contaminación y la presencia humana son algunas de las causas que han incidido en la disminución poblacional de las nutrias (Lontra longicaudis) en las inmediaciones del río Actopan, afluente que renace en el lugar conocido como El Descabezadero y desemboca en el Golfo de México. 

Así lo determinan los resultados de la investigación realizada por Luz Magali Sánchez Méndez, alumna de la Facultad de Biología de la Universidad Veracruzana (UV), quien el pasado 10 de julio presentó su examen profesional de manera virtual para obtener el título de licenciatura. 

A través de la plataforma de Google Meet expuso el tema “Preferencia y abundancia del hábitat de Lontra longicaudis en el río Actopan, Veracruz”, que fue presenciado por los integrantes del comité tutorial encabezado por su presidenta, Ana Isabel Suárez Guerrero; secretario, Margarito Páez Rodríguez, y vocal, María Camila Latorre Cárdenas, quien además es la directora de la tesis. También, el co-director, Christian Alejandro Delfín Alfonso, y familiares de la joven, atestiguaron el momento. 

El objetivo del estudio fue determinar la abundancia relativa, así como la preferencia de hábitat de la nutria neotropical en el afluente mencionado, y de manera específica documentar su presencia en los alrededores del río, identificar variables del hábitat para explicar su presencia, cuáles tienen un uso preferencial por parte de la especie y estimar la abundancia relativa. 

Luz Magali, quien en 2015 inició su formación profesional motivada por la conservación y cuidado del medio ambiente, dio a conocer que esta especie se encuentra distribuida desde la parte norte de México hasta el noroeste de Argentina. En nuestro país se encuentra en 19 de los 32 estados.

Integrantes del comité tutorial, directora, co-director de tesis y familiares, felicitaron a Luz Magali Sánchez

A nivel nacional se registraban tres especies: Lontra canadensis, actualmente extinta; longicaudis y enhydra lutris, ambas en alguna clasificación de riesgo.  

A pesar de su distribución en el país, la nutria neotropical se enfrenta a muchos problemas relacionados con la contaminación del agua, sobrepesca, desconocimiento de la especie por parte de la población en general, pues además de destruir su hábitat y cazarlas, también las capturan como mascotas. 

Por esta razón la Unión Internacional de la Conservación para la Naturaleza (IUCN) la catalogó como amenazada, debido a la disminución de sus poblaciones. 

Asimismo, se encuentra en la Norma Oficial Mexicana (NOM) 059 de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), referente a la protección ambiental de especies amenazadas y en peligro de extinción; y en el Apéndice 1 de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), por sus siglas en inglés. 

En cuanto a la medición de la abundancia relativa, la bióloga contabilizó la presencia de la nutria a través de un método indirecto de excretas y no por la captura del animal. Es decir, en su recorrido a lo largo de 30 kilómetros del río Actopan, detectó por medio de las excretas que las nutrias depositan sobre las rocas una abundancia de 0.36, lo cual indica que hay un animal cada tres kilómetros.

En la exposición mostró la preferencia y abundancia de la nutria neotropical en el río Actopan

Lo anterior lo determinó al dividir el total de excretas entre lo que se conoce como tasa de defecación y el número total de kilómetros recorridos del río. 

“De esta forma uno hace una estimación de cuántos individuos hay a partir de eso, porque al excretar el animal indica su presencia.” 

Luz Magali comparó estos resultados con los del investigador Samuel Sánchez Macías, quien en 2003 desarrolló el mismo estudio en 20 kilómetros de los ríos Pescados y Actopan, cuyo resultado arrojó que este último presentaba condiciones más favorables en cuanto a la cobertura vegetal y calidad del agua para la persistencia de la nutria. En ese entonces, detectó alrededor de seis nutrias por kilómetro. 

Pero, entre 2016 y 2018, María Camila Latorre encontró una abundancia relativa muy baja, de 1.6 nutrias. 

Respecto a la preferencia del hábitat de este animal que generalmente se halla en ríos, lagunas, pantanos y zonas salubres, el estudio indica que gusta de sitios con cobertura vegetal amplia y no urbanizados ni con pastizal, pues no le permiten escapar de depredadores y protegerse de condiciones climáticas adversas.

Luz Magali Sánchez determinó que la contaminación del río y presencia humana inciden en la disminución poblacional de la nutria

Por lo tanto, prefiere lugares con niveles de conductividad moderados, relacionados con una buena calidad de agua, pero también necesita de sitios donde pueda hacer sus madrigueras, normalmente con cobertura vegetal como raíces anchas de los árboles. 

Las conclusiones reiteran que el uso de suelo urbanizado es rechazado por la nutria, por lo que el ser humano sí es un factor que afecta la presencia de esta especie. 

Es así que recomienda evaluar más parámetros físico-químicos del agua, al igual que la abundancia de presas de la nutria para comprender mejor sus preferencias en el río Actopan, así como continuar y mejorar los estudios de evaluación del hábitat. 

Asimismo, señaló la necesidad de elaborar un Plan de Manejo y Conservación con el propósito de que la especie no llegue al grado de extinción, porque ahora se encuentra amenazada. 

Al final, la joven fue felicitada por los académicos e investigadores, quienes recalcaron la pertinencia y aportación del estudio; también compartieron sus observaciones con tal de que sea mejorado para su presentación en futuros foros y congresos. 

Después de la deliberación de los sinodales, el jurado decidió aprobarla con una calificación de 9. El profesor Margarito Páez dio lectura al acta de examen de la experiencia educativa (EE) Experiencia Recepcional y, enseguida, Luz Magali rindió protesta como nueva licenciada en Biología por esta casa de estudios.